viernes, 1 de junio de 2012

SE ACABO LA TEMPORADA DE TRAVESÍA... o eso creo

Creo que esta vez sí, se acabo la temporada de esquí, esté fin de semana nada, los dos siguientes ya tengo plan, así que habrá que ir pensando en guardar todo en la parte trasera del trastero, dejaremos en lugar preferente los cubos de playa, toalla, cantimplora y tienda de campaña.
Siempre hago un repaso mental de la temporada finalizada, rememoro momentos, lugares, estampas, personas y sensaciones tanto buenas como malas.

Me pesa que se me haya escurrido la primavera sin darme cuenta, la última salida no fue algo para recordar, las sensaciones fueron de involución total, así que sin quererlo me he ido tres años atrás y no puedo dejar de dibujar una sonrisa pensando en la suerte que he tenido.

Soy afortunada porque fue preguntar por el esquí de travesía y ese mismo fin de semana me invitaron a probar, me dejaron unos esquís, unas pieles, me indicaron y a foquear el Tres Mares, esto fue un 24 de mayo del 2009 y las pase canutas pero me gusto muchísimo.

Como hacía tan solo un mes que había empezado a esquiar tuve que decidir si esquís de pista o travesía, no tuve muchas dudas… travesía, me servirían para todo y podría disfrutarlos más tiempo y así está siendo.

Afortunada porque tras visitar varias tiendas en Santander buscando no sé el qué, acabe en AgostiXtreme, Oscar me dio buena espina y me fie al 100% de alguien a quien no conocía de nada, ni de oídas ya que en mi entorno nadie esquía ni lo han visto en la vida, estaba yo apañada para decidir que comprar. Resulto que mi instinto no me engaño y acerté, excelente profesional, esquiador y buena gente.

Empecé a esquiar en marzo y acabé la temporada el 7 de julio!! , en ese breve espacio de tiempo subí una pila de veces a Picos hasta conseguir hacer cima del Torre Blanca el 21 de junio. Estas fueron mis palabras al día siguiente:

“ayer fue un gran, gran día para mí.
Ha sido mi primera cumbre, quien me iba a decir el 3 de marzo que me calce mis primeros esquís que lo iba a conseguir haciendo travesía y en el Torre Blanca, Impensable.

Esto no habría sido posible si al comenzar mi andadura en esta actividad no hubiese tropezado con gente fantástica, personas autenticas.

Ellos me han acogido como uno más, me han enseñado, me han esperado, me han hecho autopistas, animado, ayudado, han sacrificado sus descensos sabiendo que es en lo que más se disfruta para ayudarme en el miedo que me dan las bajadas, su tiempo, por todo ello no tengo más que palabras de agradecimiento y cariño.

Estas personas me han llevado a donde nunca pensé que podría llegar, han hecho que cuando no he cogido el teleférico de bajada a Fuente Dé ya esté pensando en cómo arreglarme para poder volver el siguiente fin de semana y a donde ir.

Oscar ayer me dijo que cuando viese hoy las fotos ya vería que gozada, pues yo pensaba que no seria para tanto..., no sería como vivirlo en el momento..., ya habría pasado esa emoción, que equivocada estaba, hoy cuando me han enviado fotos de ayer, me he emocionado entera, que sensación más extraña e indescriptible, lo pienso y se me ponen los pelos de punta, que boba.

Bueno no me quiero extender más, básicamente quería con este mensajito dar las gracias a todas estas personas que se están cruzando en mi vida y que merecen tanto la pena conocer y cuidar.

Una mención especial a:
Xabi desde que he empezado compañero incansable, nos reímos mucho y me ayuda más si se puede.

Carlos eres todo entusiasmo, y lo transmites, me lo pegas, tienes una fuerza....

Oscar da gusto conocer personas como tú, que con todo lo que sabes eres tan humilde y cercano, a la vez que sacrificas un día de esquí por acompañar a alguien que no tiene ni idea de nada como yo. Dentro de 25 años en el 2034 como me dijiste espero volver y desde luego tú vendrás conmigo .


No me gustaría dejar a nadie atrás, pero estos compañeros hoy por hoy me han marcado y me han enseñado lo poco, poquito que sé en la montaña y el esquí de travesía.

Un saludo a todos y gracias por lo que me esperáis, Y POR LO QUE ME VAIS A ESPERAR

 
Un abrazo"



A día de hoy suscribo todas y cada una de esas palabras,  no han caducado y añadiría a muchas personas con las que me divierto, aprendo y por qué no decirlo.. sufro, jeje.

Os voy a contar una cosilla que tiene que ver con aquel 21 de junio cuando pensé una y no más, me lo jure y este año rompí ese trato que hice conmigo misma.

¿A que me refiero?

La canal que se encuentra debajo del tesorero y da al Jou situado detrás de Cabaña Verónica me resulto vertical, un muro,  pendiente que nunca sería capaz de solventar, de hecho está que nunca me había vuelto a asomar allí.
Este año cuando regresamos de Hoyo Grande me dicen de bajar por ese lugar, que angustia me entro...

Dejamos Jou Sengros y toca quitar pieles no me lo pienso y me dirijo a ese muro que tenía dibujado en mi cabeza. No me lo pensé, me tiré, (la nieve estaba blanda), hice giros y todo, y cuando llegue abajo…. Qué satisfacción!!, no miento si digo que me emocione y cuando lo recuerdo todavía me entra un no sé qué, el resto de la bajada fue cuando mejor me lo he pasado en estos tres años, tenía sensación de no retrasar al grupo, sin miedo, disfrutando, riendo… incluso buscaba pendiente, me encaramaba a todos lados, fue genial. Creo que la salida del año por el sentimiento tan bueno que tuve y tengo.

Me enrollo y no voy a aburrir con todo lo que se me ocurre.

Cuando acabo una temporada me marco un objetivo para el siguiente, el primer año bastante tenía con sobrevivir y lo conseguí.

El segundo quería calzarme unos crampones y arreglármelas más o menos con ellos y quitarles en miedo, ahora son una herramienta que no dejo atrás, unos salvavidas muy buenos si lo paso mal.

Este año tenía como objetivo mejorar la resistencia, poder hacer rutas más largas con un mínimo de dignidad, jeje, desde mi punto de vista conseguido, lo malo es que cómo hay mucho nivel alrededor se queda todo pequeño, todo el mundo foquea bien, rápido y mucho, yo siempre a rebufo, pero bueno, eso es no bajar la guardia en verano para aguantar a mí ritmo todo lo que pueda.
Hoy he pensado el objetivo del año que viene a tonto que parezca no lo es….. intentar vencer la cabeza con los esquís, conseguir olvidarme de lo que veo… la pendiente .

Y quien sabe si algún día...